5 consejos para una conversación saludable

Conversar con otras personas es una de las actividades más comunes y fundamentales en nuestra vida diaria. Sin embargo, no todas las conversaciones son saludables ni beneficiosas para nuestro bienestar emocional. En este artículo, te brindaremos 5 consejos prácticos para tener conversaciones saludables y constructivas. Descubre cómo mejorar tu comunicación y fortalecer tus lazos interpersonales. ¡Empezamos!

¿Alguna vez has estado en una conversación y te has preguntado: “¿De qué se trata?” Puede que pienses que no te entienden, o tal vez no los entiendes. (Aunque quieras tener una conversación sana, sientes que nadie entiende lo que estás diciendo).

¿Cuándo fue la última vez que estuviste en una conversación y solo quisiste rendirte?

¿Alguna vez has pensado en el lente a través del cual tu tema de conversación se desdibuja debido al dolor y las experiencias que has tenido en esta vida?

Quiero guiarte a través de tus conversaciones para que puedas aprender a tener una conversación saludable (incluso cuando no estés de acuerdo).

Es importante recordar: Funcionamos con amor como un automóvil funciona con combustible.

¿Qué necesita una conversación sana?

  • humildad
  • Escuche rápido
  • hablar despacio
  • Intenta comprender, pero no necesariamente estés de acuerdo.
  • El amor y la verdad son el foco.

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Cómo tener una conversación saludable usando las Escrituras:

Matthew 18:15-17 says, "If your brother sins against you, go and tell him his fault, between you and him alone. If he listens to you, you have gained your brother. But if he does not listen, take one or two others along with you, that every charge may be established by the evidence of two or three witnesses. If he refuses to listen to them, tell it to the church. And if he refuses to listen even to the church, let him be to you as a Gentile and a tax collector." 
Behave like a Christian" is the subtitle in my Bible. Romans 12:17-21 says, "Repay no one evil for evil, but give thought to do what is honorable in the sight of all. If possible, so far as it depends on you, live peaceably with all. Beloved, never avenge yourselves, but leave it to the wrath of God, for it is written, "Vengeance is mine, I will repay, says the Lord." To the contrary, "if your enemy is hungry, feed him; if he is thirsty, give him something to drink; for by so doing, you will heap burning coals on his head." Do not be overcome by evil, but overcome evil with good."

En este contexto, Pablo habla de despojarnos de las cosas terrenales que traen muerte y recordar la nueva vida en Cristo que tenemos.

5 consejos para una conversación saludable
Colossians 3:8-11, "But now you must also rid yourselves of all such things as these: anger, rage, malice, slander, and filthy language from your lips. Do not lie to each other, since you have taken off your old self with its practices and have put on the new self, which is being renewed in knowledge in the image of its Creator. Here there is no Gentile or Jew, circumcised or uncircumcised, barbarian, Scythian, slave or free, but Christ is all, and is in all."
Colossians 3:13-14, "Bear with each other and forgive one another if any of you has a grievance against someone. Forgive as the Lord forgave you. And over all these virtues put on love, which binds them all together in perfect unity.
Proverbs 16:7, "When a man's ways please the Lord, he makes even his enemies to be at peace with him." 

Nota: Los hombres y las mujeres suelen comunicarse de diferentes maneras. Los hombres pueden pensar de forma más analítica. Las mujeres pueden pensar de forma más emocional. Para tener una conversación sana, trate de comprender de dónde vienen.

5 consejos para una conversación saludable

1. Llegar al punto. Aprenda a compartir lo que realmente siente y experimenta en lugar de andarse con rodeos y esperar que entiendan lo que estamos tratando de decir. Sé directo. Se honesto. Reemplace el lenguaje “usted” con el lenguaje “yo”. Este no es el momento de echar culpas. La culpa aumenta las defensas y debilita la capacidad de escuchar.

“Me haces sentir”

“Si hubieras hecho eso”.

Compartir honestamente no se trata de culpar a alguien, sino de expresar el problema de manera integral desde ambas perspectivas, lo que crea una atmósfera para conversaciones saludables.

(A veces necesitamos seguir adelante y comenzar a sanar emocionalmente con el Señor primero. Mi libro enfrenta tus sentimientos te muestra cómo procesar todos tus sentimientos con Dios.)

La comunicación pasivo-agresiva es como un tic. Una garrapata se introduce lentamente en nuestra piel hasta que todo su cuerpo se hunde en ella y causa problemas. No compartir o ser directo se convierte en un proceso lento y doloroso de guardarlo todo para uno mismo, lo que eventualmente se arraiga en nosotros y causa aún más daño.

2. Concéntrese en los problemas, no en la persona. A veces nos concentramos tanto en menospreciar a la otra persona porque nos hace sentir que nunca llegamos al fondo del asunto.

Cuando queremos tener conversaciones saludables, queremos centrarnos en resolver el problema, no en la otra persona.

3. Escuche su lado. Lo más difícil para nosotros es escuchar cómo lastimamos a alguien, hicimos algo mal o cometimos un error. Queremos huir del dolor porque el enemigo intenta llevarnos directamente a la vergüenza. Cuando se escucha a ambas partes, la compasión y la comprensión se unen. Cuando ambas partes se expresan, tenemos un punto de partida para una solución y desarrollamos conversaciones saludables.

Para ser claros: comprensión no significa acuerdo. Sin embargo, comprender no significa que estemos de acuerdo con lo que dicen, sino que escuchamos lo que dicen y por qué llegaron a esa conclusión.

No podemos entablar una conversación queriendo tener razón y ser escuchados (o que nuestro punto de vista sea correcto).

Cuando hacemos esto, nos olvidamos de escuchar lo que la otra persona está experimentando. Así que perdemos la oportunidad de llegar al fondo del asunto. Ya sea que tengamos razón o no, podemos practicar ser “presto para escuchar, lento para hablar y lento para enojarnos porque la ira humana no produce la justicia que Dios desea”. (Santiago 1:19-20)

4. Ser escuchado con claridad. Lo que escuchamos y lo que dice otra persona pueden ser dos cosas diferentes. Cuando hablamos con alguien, es una buena costumbre repetir lo que la otra persona nos dice. Parafrasea sus palabras y pregúntales si lo que dijiste fue correcto. De esta manera, en lugar de asumir lo que dijeron, validamos lo que dijeron y creamos espacio para una conversación saludable.

5. Estilo de comunicación y límites. Cada uno se comunica de manera diferente según cómo se les enseñó, el nivel de dolor o sus experiencias. Presta atención a las palabras que usan y asegúrate de no ofenderte fácilmente. Por lo tanto, deben existir límites para que exista respeto mutuo. Algunas personas están dispuestas a hablar de las cosas de inmediato, otras necesitan unos días para procesarlo todo.

Sepa lo que necesita para una conversación saludable

Si alguien menciona algo de nuestro pasado sin abordar la situación actual, podemos guiarlo amablemente de regreso a la verdad sin insistir en nuestro pasado. (Esto es especialmente importante para las personas que no conocemos o con las que no trabajamos).

Otro ejemplo: Si hemos perdonado a alguien por un mal, todo lo que ha hecho está perdonado y queda en el pasado. No podemos seguir citando su perdón pasado para demostrar nuestro punto en el momento presente. Esto puede dificultar tener una conversación sana si seguimos culpando a los demás.

¿Dios nos hace eso?

Notas finales: Manténgase comprometido y conectado. Cada relación se verá diferente. Cuando surgen cosas, es más fácil desconectarse que mantener una conversación. Vale la pena luchar por las personas.

Otros episodios que te gustarían: Conéctate con otras personas mientras mantienes tus límites con Nicole Unice. 7 formas de cuidar tu salud emocional

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5 Consejos para una Conversación Saludable – Preguntas Frecuentes

Preguntas Frecuentes sobre una Conversación Saludable

Alentamos a todos a tener conversaciones saludables, ya que son fundamentales para construir relaciones sólidas y efectivas. Si tienes dudas sobre cómo mantener una conversación saludable, aquí tienes respuestas a algunas preguntas frecuentes:

1. ¿Qué es una conversación saludable?

Una conversación saludable es aquella en la que se establece una comunicación abierta, respetuosa y constructiva. Implica escuchar atentamente al otro, expresar tus opiniones de manera clara y comprender diferentes perspectivas. No se trata de ganar o perder, sino de buscar un entendimiento mutuo.

2. ¿Cuáles son los beneficios de tener una conversación saludable?

Tener una conversación saludable puede fortalecer vínculos, resolver conflictos, mejorar la empatía y promover un ambiente de confianza. Además, permite generar soluciones creativas, fomentar la colaboración y evitar malentendidos.

3. ¿Cómo puedo mejorar mis habilidades para tener una conversación saludable?

Para mejorar tus habilidades de conversación saludable, te recomendamos:

  1. Escucha activamente: Presta atención a lo que dice la otra persona sin interrumpirla y muestra interés genuino.
  2. Expresa tus ideas claramente: Utiliza un lenguaje claro y conciso para comunicar tus pensamientos y sentimientos.
  3. Practica la empatía: Intenta comprender la perspectiva del otro y muestra respeto hacia sus opiniones, incluso si no las compartes.
  4. Avoid usar lenguaje ofensivo o agresivo: Mantén un tono respetuoso y evita insultos o comentarios hirientes.
  5. Resuelve los conflictos de manera constructiva: Si surgen desacuerdos, busca soluciones que beneficien a ambas partes y evita confrontaciones innecesarias.

4. ¿Cómo puedo lidiar con una conversación difícil o conflictiva?

Cuando te encuentres en una conversación difícil o conflictiva, considera lo siguiente:

  • Mantén la calma: Respira profundamente y mantén la compostura para evitar reacciones emocionales excesivas.
  • Escucha atentamente: Presta atención a lo que se dice y intenta entender los puntos de vista de las demás personas involucradas.
  • Expresa tus sentimientos con objetividad: Comunica tus emociones de manera respetuosa sin atacar a la otra persona.
  • Busca soluciones: Enfócate en encontrar una resolución satisfactoria para todas las partes involucradas.
  • Sé flexible: Muestra disposición para comprometerse y considerar diferentes opciones.

5. ¿Dónde puedo encontrar más recursos sobre conversaciones saludables?

Aquí tienes algunos recursos adicionales sobre cómo tener conversaciones saludables:

Esperamos que estas respuestas hayan sido útiles. Recuerda que las conversaciones saludables son una habilidad que se puede desarrollar con práctica y paciencia. ¡Buena suerte!


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